Udaipur

Ayer llegamos a Udaipur, procedentes de Pushkar, fueron 5 horas de viaje en las que lo más reseñable es que Ghan nos invitó a tomar té masala, que tiene mucho gengibre. Eso y el súper desayuno del Dia Homestay, muesli, pancakes de Nutella, tostadas, Lassi… Llegamos a Udaipur sobre las cuatro de la tarde tras un viaje que se hizo algo pesado porque no hay paradas en el camino.

Nos dio tiempo a explorar el bazar, comprar algunos cables, ver el lago y, sobre todo, ver un espectáculo de danzas tradicionales del rajestán y marionetas muy recomendado y que nos encantó. Es música animada y bailes muy coloridos, además de que la presentadora lo va diciendo todo en inglés y en indio. El vestuario está lleno de cascabeles, todos suenan mientras bailan. Y suenan bien. Las bailarinas muestran un control de la posición corporal muy desarrollado, en bastantes números llevan muchas cosas sin sujetar en la cabeza y la gracia del baile está en que se contonean sin que se les caigan. No llega a 200 rupias cada uno y, por ese dinero (y por más), merece la pena.

Para cenar ayer fuimos a uno que sale en la guía y nos recomendó el del hotel también HariGargh: buena comida, buenas vistas y servicio lento, malo. Hoy en cambio vamos a ir al Jagat Niwas Palace (ayer fuimos en persona a reservar), un sitio elegante con una decoración muy bonita. A nuestro chófer, en cambio, le gusta más otro.

¿Y qué hicimos hoy? Ver todo lo que hay que ver en el palacio de la ciudad, dar una vuelta en barco por el lago y luego, ya después de comer, con Ghan fuimos al palacio de los monzones, al otro lago y a un parque.

El palacio real es el más grande que hemos visto hasta ahora aunque quizás no el más lujoso. Esta dividido en una zona para hoteles, una para el maharana actual)(aquí hay dudas de quién es porque se debaten la herencia el hermano mayor que ha sido desheredado y el pequeño que administra la fortuna familiar, incluyendo varios coches de lujo y un elefante). La visita esta muy bien dirigida y el paseo cuenta con varios museos de interés: plata, textiles…

Del Palacio salimos a las 11 a coger el paseo en barco, que es cada hora y antes de las 14 (hora q los indios consideran suficiente para catalogar de Sunset tour) que es mucho más barato. Se trata de Un tour de una hora por el lago Pichola haciendo parada en el Palacio de Agua (también hotel de lujo) que sin tener mucho que visitar es una muy agradable parada con sus jardines cuidados y vistas a la ciudad.

Antes de comer aprovechamos para ver la Crystal Gallery. Esta si que no la recomendamos por cara, se ve la colección de cristalería del maharana que incluye una cama de cristal, sofás de cristal, vasos, platos y las lámparas de araña más grandes imaginables. Aún así, salvo que uno sea un loco de la cristalería no vale lo que cuesta.

Comimos en O’Zen. La comida muy rica, tardaron micho en traerla pero descubrimos que era porque se habían quedado sin electricidad y estaban cocinando a la antigua usanza. Visitamos también el templo Jag…, como casi todos los templos hindúes, mucho mejor por fuera que por dentro. Allí nos sirvió de guía un espontáneo que resultó ser un pintor suponemos que se cierto nivel ya que en cinco días se va a Europa a exponer su obra. En España pasará por Madrid, Barcelona y San Sebastián.

A ver qué tal cenamos.

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